Reunión de amigas. Terminás de contar las “novedades del día” y ellas te miran con cara de “¿para cuándo el remate?”. Y no chicas, no hay más que eso, me dijo que él también había visto el recital del Pity en la tele, ¿entienden? Nos gustan las mismas cosas!!!!! Y no, no entienden… En fin…
Es ahí cuando te das cuenta de que ya no hay nada que te una a él, que “el fijo” está más cerca de ser un hijo que un pijo, que las únicas veces que hablás, por msn obvio, porque hace más de 2 semanas que no te manda un texto (y bueno, ni hablar de que fue hace aproximadamente 6 meses la última vez que escuchaste su voz por teléfono), son para comentar sobre lo raro que está el tiempo o lo cansado que lo tiene el laburo. Percibís que cada vez pone menos voluntad para verte y que cuando milagrosamente te propone algo y vos al toque le decís que sí, todavía se despacha con un “igual en un ratito te confirmo bien si voy…”.
Así y todo vos lo querés seguir viendo, aunque no te aporta nada, no te da el mejor sexo de tu vida ni te trata dulcemente. Es más, lo último que puede considerarse como “piropo” fue decirte “al fin te depilaste, negra”. Sin embargo te da miedo cambiar, ¿por qué? PORQUE PREFERÍS SEGUIR COMIÉNDOTE ESA MERCADERÍA VENCIDA QUE CAGARTE DE HAMBRE, porque conocés lo que es la sequía absoluta y como cómoda del orto que sos, una vez que enganchaste a alguien, preferís a este “malo conocido” que aunque sea te riega cada tanto… lo único que querés es tener un palenque donde rascarte… aunque éste ya esté perdiendo el filo…
Sabés que estás usando la ropa desteñida pero no querés ir al shopping… de vaga que sos nomás, porque no te gusta caminar, porque tenés que arreglarte, porque tenés que empezar de cero y ya estás harta de los “¿siempre venís por acá?” que te preguntan en el boliche o el cuento de la historia de tu familia, la facu y el laburo. Y ahí, cuando, desvelada por el tema, te das cuenta de que tu vida amorosa tiene menos gracia que un desalojo y estás re decidida a ponerte las pilas y renovar el stock de chongos, te llega un mensaje un martes a las 2 am preguntándote en qué andás (sí, sí, el celular las 24 hs prendido por si surgen estos eventitos a último momento), porque él justo está cerca de tu casa…Vos, que estabas en el quinto sueño, con los ruleros puestos y una variante de pijama (el jogging que usabas en el colegio con una remera cortada de tu hermano mayor), le contestas “Hey Seba, estoy despierta! Querés pasar por casa?”… Mentís porque sabés que esa puede ser la última vez que lo veas en los próximos 15 días.
El final, de tan obvio, es humillante, vos no andás en nada, sólo dormís porque al otro día te tenés que levantar a las 7 am para ir a trabajar... Qué problema hay si voy con sólo dos horas de sueño???????!!!!!! Y sí, Seba, te espero!!!!! Te cepillás los dientes y como una pobre condenada esperás que suene el timbre… Otra vez a comer comida de ayer…
¡Marche una vuelta de queso rancio para todas!
Así y todo vos lo querés seguir viendo, aunque no te aporta nada, no te da el mejor sexo de tu vida ni te trata dulcemente. Es más, lo último que puede considerarse como “piropo” fue decirte “al fin te depilaste, negra”. Sin embargo te da miedo cambiar, ¿por qué? PORQUE PREFERÍS SEGUIR COMIÉNDOTE ESA MERCADERÍA VENCIDA QUE CAGARTE DE HAMBRE, porque conocés lo que es la sequía absoluta y como cómoda del orto que sos, una vez que enganchaste a alguien, preferís a este “malo conocido” que aunque sea te riega cada tanto… lo único que querés es tener un palenque donde rascarte… aunque éste ya esté perdiendo el filo…
Sabés que estás usando la ropa desteñida pero no querés ir al shopping… de vaga que sos nomás, porque no te gusta caminar, porque tenés que arreglarte, porque tenés que empezar de cero y ya estás harta de los “¿siempre venís por acá?” que te preguntan en el boliche o el cuento de la historia de tu familia, la facu y el laburo. Y ahí, cuando, desvelada por el tema, te das cuenta de que tu vida amorosa tiene menos gracia que un desalojo y estás re decidida a ponerte las pilas y renovar el stock de chongos, te llega un mensaje un martes a las 2 am preguntándote en qué andás (sí, sí, el celular las 24 hs prendido por si surgen estos eventitos a último momento), porque él justo está cerca de tu casa…Vos, que estabas en el quinto sueño, con los ruleros puestos y una variante de pijama (el jogging que usabas en el colegio con una remera cortada de tu hermano mayor), le contestas “Hey Seba, estoy despierta! Querés pasar por casa?”… Mentís porque sabés que esa puede ser la última vez que lo veas en los próximos 15 días.
El final, de tan obvio, es humillante, vos no andás en nada, sólo dormís porque al otro día te tenés que levantar a las 7 am para ir a trabajar... Qué problema hay si voy con sólo dos horas de sueño???????!!!!!! Y sí, Seba, te espero!!!!! Te cepillás los dientes y como una pobre condenada esperás que suene el timbre… Otra vez a comer comida de ayer…
¡Marche una vuelta de queso rancio para todas!
Me gusta el blog, chicas, pero a ver cuándo se publica un "se me dio" que lo deje al Chongo mal parado!!! "No te pasa sólo a vos" tiene que tener un poco de divismo, o no somos un poco divas las mujeres al final de cuentas??? Muerta de hambre, pero que no se note!!! Sigan publicando cosas divertidas. Besotes. Belu
ResponderEliminarYa las tengo en mis favoritos, al igual q a jamastransada !!!
ResponderEliminar(vieron "Simplemente no te quiere"?... todas en el cine nos reímos al ver la peli para no llorar x lo patéticas q en realidad somos)
Gracias Pato!!!
ResponderEliminarSí, la vi con tu hija!! Nos encantó!!!!!!!!!