No quiero empezar siendo tan trágica pero no por eso le vamos a quitar seriedad al tema del que les quiero hablar: el forro, el profiláctico, el globito (llamado vulgarmente): ¿les suena? Ese que es nuestro amigo más fiel a las horas de las relaciones sexuales, ya que nunca falla (exceptuando casos contados en el que “se pinchó”). Sí, querida chonga, de eso quiero hablarte hoy, porque anécdotas tenemos y conocemos a montones, de las que nos reímos mayormente, aunque a veces no. Y no me vengo a hacer la maestra ciruela (¡ni a palos!), de hecho, mientras intento escribir este texto tengo interrupciones cada dos por tres de mi hija (a la cual amo sin ninguna duda).
Frases que hemos dicho y escuchado mil veces me llevaron a esto (sepan disculpar el vocabulario): “no pasa nada boluda, acabó afuera”, “le dije que se lo ponga pero es alérgico al látex”, “se lo puso y se le bajó”, “estábamos ahí y la verdad nos re calentamos, y no llego a ponérselo”, “no nos cuidamos porque no estoy ovulando”, “ya era el segundo polvo y acabó re poco”, “es que se me esta yendo…”, etc. Y así podría seguir con muchísimas frases más. Igual, claramente, no me estoy refiriendo ni a matrimonios ni a relaciones serias y duraderas. Me refiero a nuestra relación de chonga-chongo.
Yo entiendo (y doy fe) que es hermoso piel con piel pero deberíamos tener más consciencia, no sólo porque podemos quedar embarazadas -ya que, de última hay dos opciones muy claras- sino porque, amigas, hay muchas enfermedades que las re contra conocemos y somos súper conscientes de que algunas de ellas son para toda la vida. Se sabe que en “ese momento” perdemos la cabeza pero no por eso nos olvidemos de usarlo, porque es muy lindo tener relaciones y después no tener que preocuparse ni hacerse el bocho con algo que pueda llegar a pasar post-inconsciencia (mutua, obviamente, porque siempre es culpa de ambos).
Tampoco olvidemos estas otras frases poco felices y que sufrimos en carne propia (ya sea por nosotras o por alguna de nuestras amigas): “no me vino todavía, me quiero matar”, “me dio positivo”, “porfi hoy cuando nos juntemos acompáñame que me quiero hacer el test porque me come la cabeza este atraso”, “me tomé la pastilla del día después y menstrué 20 días de los 30 del mes”, “tengo nauseas por la puta pastilla”, “hoy me saco sangre y me hago el del hvi, tengo miedo” (y sí, todas alguna vez tuvimos miedo), etc.
No esperemos a que nos venga, ni esperemos a que cualquier análisis nos de negativo (esa espera es atroz y vos me entendés): usemos forro, y aunque no guste hagamos el famoso “petiso con globito”, porque chicas para que los demás nos cuiden y nos respeten primero tenemos que querernos nosotras.
